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Oid mortales, el grito sagrado


11 de mayo – Día del Himno Nacional Argentino

¡Oid mortales el grito sagrado

libertad, libertad, libertad!

Con esta estrofa comienza la máxima canción patria que nos identifica como argentinos, nuestro Himno Nacional.

Desde niños comenzamos a oír sus versos, a reconocer su melodía y así,  en todas sus manifestaciones nos emociona y nos enorgullece.

Su canto nos permite reforzar  el vínculo emocional entre varias generaciones y su permanencia en el tiempo fortalece nuestra unión como pueblo.

Este 11 de mayo recordamos el día en que la letra del Himno fue aprobada por la asamblea del año XIII, después de una larga espera por una canción que nos identificara como pueblo.

Ya en 1812 el Triunvirato había manifestado la necesidad de tener una canción de la Patria, para ser ejecutada en las funciones importantes y en las escuelas, debiendo ser escuchada de pie con total respeto.

Pero recién en 1813, la Asamblea General Constituyente fue la encargada de mandar a componer esta “Marcha Patriótica”, encomendando tan loable tarea de escritura a Vicente López y Planes, con el acompañamiento de Blas Parera en la composición de la música.

La tradición cuenta que se cantó por primera vez en casa de Mariquita Sánchez de Thompson y fue ella quien entonó los primeros acordes, posiblemente el 14 de mayo de 1813.

Esta Marcha patriótica", como se la conoció primeramente sufrió cambios a través de su historia, tanto en su título como en su letra. Recibió diversos nombres, como "Canción patriótica nacional" o “Canción patriótica”, recién en una publicación de 1847 se lo llamó "Himno Nacional Argentino", nombre que conserva hasta la actualidad.

La primera versión, constaba de 9 estrofas de 8 versos, más un estribillo de 4 versos con una fuerte intención antimonárquica y antiespañola.

Sin embargo, con el tiempo, y bajo el argumento de dotar al Himno de “atemporalidad” y limar asperezas con la diplomacia española, en el año 1900, el general Julio Argentino Roca sancionó un decreto donde  ordenaba modificar las estrofas y abreviar su extensión, sin tintes peyorativos sobre otras naciones. El resultado de esta modificación, es lo que conocemos y cantamos actualmente, la primera y última cuarteta, más el coro.

Con la frase “¡Libertad! ¡Libertad! ¡Libertad!” podemos resumir  el sentido fundamental del himno, sus valores independentistas, la emancipación de un pueblo, el restablecimiento de su dignidad y la exaltación del valor y la grandeza de los todos los argentinos, haciéndolos sentir orgullosos del pasado y del futuro.

 

Profesora a cargo: Daniela Corzo.

Estudiantes de 3er año del Profesorado de Lengua y Literatura.

Cátedra: Literatura Argentina.

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